La Casa de Bola está rodeada de jardines verdes y amplios y ofrece un servicio gratuito de traslado de ida y vuelta al centro de Negreira, a 1,4 km. Cuenta con habitaciones encantadoras con calefacción y TV.
Las habitaciones incluyen baño privado y presentan una decoración rústica, con techo con vigas de madera y paredes de piedra vista. Se proporciona conexión Wi-Fi gratuita en las zonas comunes.
La Casa de Bola cuenta con zona de salón, biblioteca y comedor precioso donde se sirve el desayuno por las mañanas. También se ofrece set de té.
El establecimiento presta servicio de traslado de ida y vuelta al Camino de Santiago a Finisterre, situado a poca distancia.
Este alojamiento dispone de aparcamiento privado gratuito y se encuentra a 25 minutos en coche de Santiago de Compostela. En el entorno rural hay buenas rutas de senderismo y de ciclismo, y se pueden practicar otras actividades al aire libre tanto en las Rías Altas como en las Rías Bajas, a 1 hora en coche.
Puntuación basada en 83 comentarios
Espléndido
9.7/10
Habitaciones: 4
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Dirección: Lugar de Covas, 9, Negreira 15830 
(Mapa)
Casa de Bola - Fotos
Lo que la gente dice
La casa, las instalaciones y el entorno son espectaculares. La casa está decorada con muy buen gusto, además de ser acogedora. En cuanto a la limpieza, todo estaba impecable.
El desayuno fue muy abundante y variado, con tostadas, bizcocho, fiambre, fruta, zumo y café.
En mi opinión particular, además del alojamiento, resaltaría el trato y la atención tan amable recibidos por parte del dueño. todo comentarios »
La casa es preciosa y está en un lugar tranquilo pero fácil de encontrar.
A destacar la amabilidad de los dueños, ibamos a una boda y se ofrecieron a acompañarnos al pazo situado a 3 km por si no lo encontrabamos.
El desayuno con productos caseros muy bueno.
Muy bonito, tranquilo, todo detalles, nos fueron a buscar a Negreira
tras una dura etapa del camino (por el calor), el jardín encantador,
para descansar por la tarde y para desayunar.
El trato excelente y la casa está fenomenal, merece la pena para quienes tengan que pasar por Negreira en el camino de Santiago.
Se desviven por sus huéspedes. Es una casa antigua, de piedra, majestuosa. El desayuno en el jardín ya vale una estancia.
Personal súper agradable,habitaciones amplias y muy bonitas. Desayuno magnífico.
Nada, todo muy bien, pero si se pudiera cenar algo ya sería ideal, para
no tener que ir a Negreira.
